Here comes the rain

Lo diré una sola vez: Vacía. Ñoña.
Ahora puedes olvidarlo y volver a tu vigilia-letargo.
No quiero la opinión de espinos
que ahogan las rosas.

Quiero un taxi.
Segunda estrella a la derecha,
quédese las vueltas,
que pase un  buen día.
Vivo rodeada de miseria
con los pies anclados en las vísceras del mundo.
No hay quimioterapia
para el cáncer del alma.
No hay electroshock
que reinicie la memoria y la sonrisa.
La humanidad se pudre agusanada
como la manzana que nadie muerde.

Sólo nos quedan los sueños.
Sólo nos queda la fe.
Sólo nos queda el aliento arrebatado
al último verso de un poema de amor.

Con el pecho descubierto
grito un " vuelva usted mañana"
a la amargura.

Y me visto de arcoiris para recibir la lluvia.



Hace unas semanas tuve la suerte de poder participar en la primera tea party de LIW, y escribí un pequeño review que podéis leer aquí