Las lolitas que surgieron del hielo

Me lié la manta a la cabeza y hace cosa de un mes decidí organizar una quedada EGL a la envidia de las maravillosas quedadas que veía en Livejournal de nuestras vecinas escandinavas.
Burgos parecía el entorno perfecto para llevarla a cabo. Conozco la ciudad, y sus calles y edificios de piedra son el fondo perfecto para el lado más oscuro del lolita (con perdón del Guro). El frío seco habitual iba en consonancia con el de las quedadas nórdicas (aunque la verdad, si hiciese un poco menos se agradecería)

No contaba con la torpeza de la oficina de turismo, que parece tener miedo de que robemos el alma de las piedras al sacarlas unas fotos, por lo que del plan inicial de visitar Las Huelgas, ha terminado en una visita a la Catedral. No es que la Catedral no merezca ser visitada, sino que en mi cabeza ya había encontrado en Las Huelgas el escenario perfecto para las fotos de la quedada.

En fin, que tengo todo organizado, pero faltan dos días para la quedada, y estoy medicándome a marchas forzadas porque un inoportuno resfriado ha decidido hacerme compañía. Me lo cogí en la Nihon, ¡aunque en Bilbao hacía buenísimo!

Mis dos conjuntos de la Nihon Jaia:



De cara al conjunto del sábado, voy a intentar fabricar un tocado con velo, que tengo ganas de algo así desde hace mucho tiempo. Lla quedada es la excusa adecuada para utilizarlo.
Aunque obviamente será en negro y las flores serán rosas :P



¿Moriremos congeladas como mamuts? ¿Pareceré una mariscadora gallega en vez de una sofisticada lolita con velo? Todas estas preguntas y muchas más tendrán respuesta en un par de días...